Las botellas de agua mineral natural están fabricadas con PET, siglas que responden a su composición química, Polietileno Tereftalato. Este material se patentó en 1941 y en 1976 comenzó a utilizarse en los envases. Su ligereza, transparencia, resistencia, total reciclabilidad y que es apto para productos alimentarios explican que se haya generalizado.
Desde aquel 1976 la innovación y el desarrollo tecnológico han posibilitado la mejora de estos envases haciéndolos más ligeros y sostenibles durante todo su ciclo de vida. Desde su producción hasta su transporte, distribución y reciclaje. Los ejemplos son muy diversos:
- En 2015, se consiguió reducir el peso de las botellas de agua de litro y medio hasta los 26 gramos. Siendo capaces de envasar más de 57 veces su propio peso. El PET reciclado, conocido como rPET, se obtiene del reciclaje de los productos elaborados con PET. Cada vez más, las empresas envasadoras de agua mineral natural utilizan rPET. De manera que los consumidores pueden encontrar ya botellas fabricadas con un 25%, 50% y llegando al 100% de este PET reciclado.
- El BioPET es un plástico cuya composición tiene un origen vegetal y que algunos embotelladores de agua mineral natural han empezado a utilizar junto con el PET. Un ejemplo de BioPET es el que se obtiene de los desechos provenientes de la caña de azúcar. El envase resultante ofrece las mismas propiedades y características de seguridad, resistencia e higiene para conservar el agua mineral natural que los de PET convencional.
Envases del Agua Mineral, el PET
Los envases de PET posibilitan que el agua mineral natural pueda estar disponible en todo momento y lugar. Sin alterar su sabor, su pureza original o sus propiedades nutricionales. En este sentido, junto con los alimentos infantiles, el agua mineral envasada es el producto más reglamentado en cuanto a seguridad y calidad alimentaria.
Los envases de PET de agua mineral, no solo permite proporcionar a los consumidores una hidratación de calidad y con garantías. Sino también estar disponible en situaciones de emergencia o desastres naturales. Cuando pueden producirse problemas en el suministro de agua de la red entre la población afectada.
Son muchos los beneficios y ventajas que aportan los envases de PET. Por ello, y apostando por la sostenibilidad y el cuidado medioambiental, las empresas envasadoras de agua mineral han adquirido un Compromiso Medioambiental Voluntario “2030 Naturalmente» que cuenta, entre sus objetivos destacados, el de incrementar la tasa de reciclado de botellas de PET hasta alcanzar el 95% en 2030, así como el uso de rPET en los nuevos envases hasta lograr un 50% de material reciclado en 2030.
Este compromiso se enmarca a su vez dentro de la denominada Economía Circular que la Unión Europea está impulsando entre sus Estados miembros. La Economía Circular se basa en el ciclo de la naturaleza, donde los residuos se transforman en recursos, ahorrando materiales y energía, y creando miles de puestos de trabajo.
Para ello, la colaboración ciudadana es esencial. Depositar los envases de agua mineral en el contenedor amarillo cuando ya se han consumido supone recuperarlos para su reciclaje. Así se puede disponer de más material para producir nuevas botellas o incluso para otros productos, como ropa, juguetes, diversos bienes industriales, etc. de manera más sostenible que si se tuviera que fabricar un PET nuevo.